Estás embarazada, tu cuerpo cambia y tú te sientes distinta. Entre lo que te cuentan, lo que has leído y lo que te imaginas es normal que te asalten las dudas y los miedos. Para despejarlos, se los hemos planteado a la Dra. Victoria Verdú, ginecóloga experta en reproducción asistida y coordinadora de ginecología de la clínica GINEFIV. Toma nota…
1-¿Es normal tener más flujo?
En efecto, en el embarazo el flujo se vuelve más abundante y de consistencia más espesa debido a que la placenta produce mayor cantidad de estrógenos y progesterona, siendo similar a lo que sucede cada mes al ovular, cuando también se producen más estrógenos y, en consecuencia, el flujo aumenta.
2-Si tengo pérdidas, ¿significa que voy a perder al bebé?
Las pérdidas sanguíneas, cuando se producen en el primer trimestre, suelen asociarse al desprendimiento de las estructuras que constituirán la futura placenta, y lo habitual es que cedan con reposo y la administración de preparados que contienen progesterona.
Si hay pérdidas en el segundo y, sobre todo, en el tercer trimestre, éstas pueden alertar de un adelanto del parto, por lo que es recomendable acudir al centro hospitalario más cercano.
3-¿Qué pasa si aparece alguna contracción?
Las contracciones que se producen durante el embarazo se denominan contracciones de Braxton Hicks y son más habituales a partir de la semana 20-25. De hecho, tener alguna contracción se considera normal pues la musculatura uterina se prepara para el momento del parto. Aunque indoloras y cortas (suelen durar unos 30 segundos) son algo incómodas. A medida que el embarazo avanza, estas contracciones se pueden ir volviendo más frecuentes y duraderas. Eso sí, en caso de darse cada 10-15 minutos es importante acudir al especialista.
4-¿Cuándo he de notar que se mueve?
En el primer embarazo lo habitual es que empecemos a notar los movimientos del bebé en la semana 20 o 21, mientras que en los siguientes embarazos se notan antes porque los músculos de la pared uterina están más distendidos. Es frecuente que notemos más sus movimientos después de haber comido y sobre todo al ingerir alimentos azucarados, y también cuando estamos en reposo.
5-¿Cómo sabré cuándo estoy de parto?
Existen diferentes señales que pueden avisar de que el parto se acerca: contracciones rítmicas, un pequeño sangrado o la rotura de la bolsa (“romper aguas”). Ante cualquiera de ellas es importante avisar a nuestro ginecólogo y acudir al hospital.