El busto es el mayor símbolo de la feminidad y una de las partes del cuerpo que más preocupa a las mujeres, sobre todo cuando llega el verano. Para mantenerlo bonito y evitar la temida flaccidez y las estrías, ejercitarlo es fundamental.
En verano el pecho adquiere más protagonismo: con bikini, bañador o camisetas ajustadas es difícil esconderlo. De ahí que la preocupación de muchas en esta fechas sea acabar con la flacidez, estrías, poco volumen… Y es que al carecer de músculos que ejerzan de sujeción, el pecho es una de las zonas que más se estropea con el paso del tiempo. En efecto, se trata de dos glándulas situadas sobre los músculos pectorales y sostenidas tan sólo por la piel, razón por la cual tienden a caer con facilidad, y sufren especialmente los cambios de peso, los malos hábitos, la maternidad y la falta de cuidados, que pueden hacer que envejezca antes. Así, para conseguir un pecho atractivo es preciso mantener elástico el tejido cutáneo que lo cubre con una dieta correcta, hidratación y una buena postura, además de fortalecer los músculos pectorales y dorsales que ayudan a su sostén, con ejercicio específicos. Si además le procuramos algunos cuidados básicos, podemos cambiar su aspecto y prevenir muchos problemas.
El mejor ejercicio
La combinación de media hora de ejercicio aeróbico tres veces por semana con un programa de pesas y fortalecimiento de la musculatura pectoral (ver recuadro) se traduce en una mejora de la piel de los senos y en una buena postura.
La natación y la gimnasia acuática también son excelentes para fortalecer los músculos de los brazos y la parte superior del torso, al igual que el baile clásico y el ballet. Sin embargo, aunque el deporte en general es beneficioso para la musculatura pectoral, debemos tener cuidado con los ejercicios violentos, los saltos y el footing, pues el deporte de alto impacto puede resultar perjudicial y más si no se utiliza un buen sujetador deportivo. Las mujeres con poco pecho, además, deben vigilar en no excederse con el ejercicio ya que si se quema mucha grasa, se puede llegar a consumir el tejido, e incluso perder media talla.